A menudo lo virtual se denuncia como un nuevo objeto de adicción para los adolescentes. Aquí abordaremos el punto de vista según el cual este útil favorecería la elaboración de la capacidad depresiva antes de constituirse el « Yo » en lo real. La pantalla entre el cuerpo y el sujeto, la computadora, seria el primer lugar de simbolización a fin de acceder a una verdadera subjetivación. Transportando a un otro espacio y a un otro tiempo, lo virtual permitiría de abordar de otra manera la temática de la temporalidad relativa a la problemática de la perdida. La perdida del objeto engendra el advenimiento del « Yo ». ¿ De que manera lo virtual puede constituir un nuevo lugar de apropiación de la ausencia ? ¿ Como es que el puede permitir el paso de una intemporalidad a una atemporalidad ? Esta idea será aclarada a través del caso de un joven autista como arquetipo de la perdida pero también del paso de lo imaginario a lo real.
Adolescence, 2013, T. 31, n°2, pp. 417-427.