La emergencia de lo femenino erótico durante el periodo pubertario es que hace efracción durante la adolescencia tanto para la niña como para el niño.
El adolescente mujer o varón debe extraerse a la seducción y al yugo maternal la cual tiende a la indiferenciacion para poder orientarse hacia la seducción y la identificación paternal en un nuevo trabajo de acceso a la diferenciación de sexos masculino-femenino el cual puede ser nombrado “ trabajo de lo femenino ” et que conduce al encuentro erótico y amoroso.
La seducción paternal funciona después, reorganizando la seducción precoz maternal la cual posede dos caracteres la de provocar una efraccion en el sentido de ruptura a veces traumática, pero también nutriente en el sentido de la reestructuración. Así, la seducción paternal, tiene un carácter iniciatico y lanza un cambio de objeto. Entre los dos, puede producirse una operación compleja de apropiación del cuerpo y de la sexualidad a través de un camino de auto seducción pulsional. La función del “ doble ” que tiene el terapeuta permite la elaboración.