Este trabajo, muestra a partir de una observación el lugar que puede ocupar un aborde familiar de los modos del funcionamiento limite durante la adolescencia. Este lugar, no es considerable que luego de una necesaria clarificación del contexto cuando numerosos profesionales se comprometen el la situación. El modelo de apego y el hecho de tomar en consideración la realidad relacional y el compromiso activo del terapeuta son elementos determinantes.
Adolescence, 2014, 32, 3, 577-597.
Starting with a clinical observation, this work shows the place that can be taken by a family approach to modes of borderline functioning in adolescence. This place can be conceived of only after a necessary clarification of context when a many professionals are engaged in the situation. The model of attachment, the taking into account of relational reality and the active engagement of the therapist are decisive factors.
Adolescence, 2014, 32, 3, 577-597.
Ce travail montre, à partir d’une observation, la place que peut prendre l’abord familial des modes de fonctionnement limite à l’adolescence. Cette place n’est envisageable qu’après une nécessaire clarification du contexte lorsque de nombreux professionnels sont engagés dans la situation. Le modèle de l’attachement, la prise en compte de la réalité relationnelle, et l’engagement actif du thérapeute sont des éléments déterminants.
Adolescence, 2014, 32, 3, 577-597.
Los problemas ligados a la adolescencia o al fin de la adolescencia van a presentarse en términos de parentalidad ; Cada vez que los padres toman una cita que concierne su hijo . En esos casos parece importante que las intervenciones terapéuticas tomen en cuenta de lo que está en juego a la vez sobre el plan individual y sobre el plano de la relación entre los diferentes protagonistas. Un estudio crítico de ese modo de intervención será presentado. Abordando precisamente la posición del terapéuta o de los terapéutas en referencia al concepto de resonancia definido por Elkaïm.
En el camino hacia la autonomización el adolescente a veces se confronta a la soledad. Ciertas conductas patológicas como las fugas o “ las falsas partidas ” parecen indicar a la vez la expresión de un malestar resentido y la necesidad del otro. La teoría del apego como teoría de la relación ofrece un modelo de comprehensión de esas situaciones, cuya coherencia radica sobre el hecho que ella se centra sobre lo interpersonal y sobre la posibilidad de interveciones terapéuticas familiares. En esta dirección, los dos conceptos de “ resonancia ” y de “ objeto flotante ” presentan un gran interes.
La recomposición familiar es la ocasión de cambios múltiples individuales y grupales. Esos cambios, solicitan particularmente la parentalidad. Antaño la recomposición familiar sucedia al cabo de un deceso y tenia el rol de realizar una familia de substitución. Actualmente es una familia adicional y el niño a veces se encuentra confrontado a una verdadera « constelación parental ». Muchas veces es conducido a jugar un papel activo en los juegos complejos a los cuales se libran los adultos, y ello particularmente a la adolescencia. Asi cuando el hijo deja uno de sus padres para ir a vivir con el otro, el adolescente relanza lo anteriormente jugado entre los partenarios separados, al mismo tiempo que su sola presencia en el hogar recompuesto interroga fuertemente sobre la conyugalidad de la nueva pareja. Una crisis se desarrolla muchas veces con mas amplitud puesto que las tensiones son en la mayoria de veces mas actuadas que pensadas. Ello tiene consecuencias sobre las intervenciones terapéuticas basadas esencialmente y ello al menos durante el primer tiempo, sobre una clarificación relacional que debe ser rápida y breve. El riesgo de una explosión familiar asi como también de una nueva separación, es grande.
Problems related to adolescence, or the end, of adolescence, are often expressed in terms of parenting each time parents attend an appointment regarding their child. In these cases, it seems important for the suggested therapeutic interventions to consider what is at play both at the level of individual psyches and at the level of the relationships between the various protagonists. A critical study of this kind of intervention is made, especially in terms of the position of the therapist(s) with respect to the concept of “resonance” as defined by Elkaïm.
On the way to becoming autonomous, the adolescent sometimes meets with solitude. Some pathological conduct, such as running away or “ false-starts ”, seem to bear witness to this, being both an expression of the malaise the adolescent feels, and an appeal to the other. As a relations theory, the theory of attachment offers a model for understanding these situations where coherence must be centred on the interpersonal and on the possibility of family therapy interventions. In this direction the two concepts of “ resonance ” and of “ floating object ” hold much interest.
The family’s reconstruction occasions numerous individual and group changes. These changes touch particularly upon parenthood. In the past family reconstitution occurred after a death and achieved a substitute family. Now it achieves an additional family and the child finds himself confronted with a real « parental constellation ». It often induces him to play an active part in the complex games the grown ups are practicing.
So when he leaves one parent to live with the other, the adolescent revives the old game played between the separated partners. At the same time, his new presence within the reconstituted household strongly tests the marital life of the new couple.
A crisis develops all the more in that the tensions are more often acted than thought. It has consequences on the therapeutic interventions, which are essentially based, at least initially, on a relational classification which must be quick and brief. In fact there is a great risk of the family shattering and of a new separation.
L’adolescence peut être comprise comme une crise des liens nécessitant la mise en place de nouvelles élaborations dans les rapports entre l’individu et l’environnement.
Lorsque des symptômes apparaissent et font l’objet d’une demande de consultation, ils doivent être compris à la fois dans la logique du sens, propre à la problématique du sujet, et dans celle d’une fonction au sein d’un ensemble groupal dysfonctionnel.
Une observation clinique illustre les modalités d’interventions thérapeutiques qui peuvent être mises en place à plusieurs niveaux.