Después de haber precisado algunas problemáticas teóricas centrales del periodo de la latencia ; este trabajo insiste sobre el hecho que la latencia no es un estado como los otros y que es el fruto de una co-construcción entre el niño y los adultos. A partir de ellos se intenta abordar las tentativas de suicidio de los pre adolescentes cuya recrudescencia actual es cierta en nuestras sociedades occidentales. Quizás ello esté relacionado con el hecho que los bebés no han tenido el tiempo suficiente de ser bebés.
La adolescencia constituye una temporalidad específica que trastoca el desarrollo ontogenético del ser. En ese sentido, representa una catástrofe morfogenética que requiere ser asimilada por el sujeto. Como etapa estructuralmente fundamental en el plano psíquico, esta catástrofe toma en cuenta las experiencias y los puntos de ruptura anteriores. No obstante, sufrimiento no rima sistemáticamente con ruptura o crisis, aun cuando se le atribuye generalmente un carácter mortífero. El encuentro previo y precoz con lo sexual en el marco de un atentado sexual ocurrido durante el periodo de latencia modifica el desarrollo clásico del equilibrio psíquico. Desde un punto de vista social, esta experiencia vivida inicial abre paso a una percepción específica de naturaleza catastrófica e inscribe casi siempre la vivencia dentro de una visión destructora, modificando así el conjunto de elementos que constituyen la estabilidad psíquica del sujeto. Sin embargo, la apropiación de esa experiencia de lo sexual como experiencia de vida no ha de ser concebida como un obstáculo ni como un proceso de involución de la evolución psíquica, sino como una etapa que necesita ser tomada en cuenta en el desarrollo sucesivo de las catástrofes inscritas en la ontogénesis humana. De ahí que esta etapa connote de manera tan específica la fase de la adolescencia, la cual constituye un tiempo singular en la revelación del atentado sexual. Dicha revelación se convertiría entonces en un momento de personalización por el sujeto de aquello que representa para él una catástrofe íntima
En un intento por responder a la interrogante planteada, la autora propone una reflexión en torno a la evolución de las características de los niños y de los adolescentes en el transcurso de los últimos quince años en el mundo occidental, principalmente en Francia. Lo anterior la conduce a concluir que, hoy por hoy, asistimos a una desaparición paulatina de las características respectivas del periodo de latencia, la pubertad y el segundo periodo de adolescencia. Esta conclusión conlleva serias consecuencias, pues pone totalmente en entredicho la constitución del mecanismo de represión y del carácter bifásico de las identificaciones post-edípicas descritas por Freud.
Considerando la formación actual del psicoanalista en general, la autora propone adoptar como modelo técnico primordial el de la cura infantil, para luego instalar la cura adolescente, sin tratar de oponerlas entre sí, pues tampoco lo están las estructuras psíquicas de los sujetos a los que se refieren dichos modelos.
¿ Que es lo que en las bandas dibujadas « Titeuf » y la película de dibujos animados « south park » va hacer reir a los adultos ?
Los heroes son los niños en periodo de latencia y los preadolescentes. Ellos convocan el los adultos por medio de la « broma picaresca » la evolución de la sexualidad infantil y un cuestionamiento alrededor de la diferencia de los sexos.
Las tansformaciones en las identificaciones de la jóven muchacha en el paso del fn de la infancia a la adolescencia es ilustrado a partir de datos de una investigación sobre los pre-adolescentes y su avenir. La investigación fué efectuada a partir de entrevistas y de una metodología proyectiva. Mientras que las jóvenes muchachas pre-púberes y púberes tenen en mediana la misma edad. Las diferencias radicales se observan en lo que concierne la mutación de una femenidad de superficie hacia una feminidad de los orificios según la presencia de la menstruación o no ; ilustrando así la validez de las hipótesis sobre el « pubertario » propuestas por Ph. Gutton. Paralelamente, los movimientos psíquicos de separación de las imágenes parentales representan como un paso hacia la subjetivación.
Revue semestrielle de psychanalyse, psychopathologie et sciences humaines, indexée AERES au listing PsycINFO publiée avec le concours du Centre National du Livre et de l’Université de Paris Diderot Paris 7