El adolescente que ataca su propio cuerpo, muy a menudo, anda encerrado en una lógica de doble de la cual trata de protegerse y salir. Ello presenta la ventaja de mantener la ilusión de poder, resentido cuando era niño, y proyectarla en el otro con la violencia que la acompaña, y fijar esta última, revolviendola contra sí mismo de manera dirigida y limitada. Las automutilaciones que el adolescente se inflige constituye testimonios reales de la ilusión necesaria para construirse. El interés de la obra como el Trovero de Verdi, es de hacernos acceder a un escenario mítico sobre el cual se apoya ese tipo de comportamiento y de abrir una vía a su análisis. Descubrimos particularmente, como la automutilación constituye en el caso de algúnos adolescentes un rito de iniciación y de paso, gracias al cual, se afrontan a un doble mítico ; en un primer tiempo a través ellos pero guardando la posibilidad de desenmascararlos.