»A partir de una secuencia clínica, el autor muestra la importancia y las modalidades del evento psíquico que representa la excorporacion de un muerto, este evento surge el marco de un análisis y es susceptible de producir un aparente episodio de morcelamiento del cuerpo, pero puede finalmente precipitar el advenimiento de un « yo « identificado en fin sexualmente. Esta trasformación de una potencialidad melancólica en el caso de un sujeto conlleva la recomposición de un proceso asociado al « complejo de nebenmensch « (Freud), instaurando los limites entre el cuerpo propio y el objeto así que la aprehensión de la identidad y de la alteridad.»