En el prefacio de la pieza de teatro « El despertar de la primavera » de F. Wedeking, J. Lacan ha hecho valer varias tesis no solamente sobre la adolescencia sino también sobre lo que nos muestra la adolescencia. Nosotros aquí retendremos una de entre ellas : no hay iniciación. A partir de ello, intentaremos de poner en evidencia de sobre que reposa la dificultad al mismo tiempo que la necesidad del desapego del adolescente del saber del Otro parental.
A través del estudio de un caso, los autores interrogan la práctica deportiva de alto nivel de los jóvenes « prisioneros de la gloria », cuyo acceso a una posición de demiurgo pasa por la denegación de los límites y el fantasma de omnipotencia. Cuando el real del cuerpo y las heridas hacen irrupción, esos campeones formulan en primer lugar un pedido de restauración de su « aparato a performancias » el cual avanza progresivamente, hasta permitir la apertura de su mundo interno y la emergencia de una compleja conflictualidad anterior.
Este artículo retoma el hilo de la interpretación freudiana de Dostoievski y el parricidio, para abordar la cuestión del estatuto psíquico de ciertas formas de crisis epilépticas entre niños y adolescentes, asociadas a situaciones traumáticas. Se intenta desprender la dimensión específicamente psicosomática de la crisis, a manera de defensa incorporativa de esencia melancólica. Dicha crisis contribuye al advenimiento de un » sujeto » (en realidad desubjetivado), poseído por el Superyo » obsceno y cruel » mencionado por Lacan. La crisis aparece como un luto imposible, en la medida en que, por su violencia de naturaleza pulsional, » recupera » la carga libidinal del trauma y lo repite de modo » infernal » (Freud). Las perspectivas terapéuticas que implica semejante función paradójica del traumatismo son una prolongación del diálogo teórico y clínico entre Freud y Ferenczi.
Revue semestrielle de psychanalyse, psychopathologie et sciences humaines, indexée AERES au listing PsycINFO publiée avec le concours du Centre National du Livre et de l’Université de Paris Diderot Paris 7