A partir de la sicoterapia de un adolescente de quince años, la autora propone una reflexión teórica y clínica sobre la función de la alucinación y sus destinos. Cuando el Yo no siente más la imagen de la alucinación como falsa, ella se dota de un poder de realización borrando los límites de la percepción. Cuando la alucinación no es más una potencialidad de la creación se transforma en una proyección de persecución; la pregunta es ¿De que fuerzas se encargara la transferencia?.
La idealización es considerada en el seno de tres componentes del amor humano « excitación, idealización y cariño » esta contextualización permite de comprender mejor las repercusiones complejas y contradictorias del ideal. La esperanza, también está ligada al amor. Descriptivamente, la esperanza pone en el futuro el objeto del amor y de la satisfacción primaria perdida para siempre en el pasado. En el movimiento hacia adelante y progrediente, parece posible de encontrarlo en un punto de escape que se aleja sin cesar y que no será alcanzado nunca. Si seguimos Freud, la esperanza « es la esperanza de los re encuentros alucinantes con el objeto perdido de la satisfacción ». A partir de Freud, el autor propone una fenomenología y una metapsicología de la esperanza la cual toma en cuenta una teoría de la alucinación elevándola a un nivel de concepto. Un ejemplo clínico articulado al ideal y la esperanza : la esperanza nace de la disminución de una idealización de idolatría. La desaparición de la Esperanza de amar y de ser amado trae la desesperanza y finalmente la muerte.
Al final de su vida, François Mauriac, evoca su convicción delirante que lo acechó brevemente cuando tenia una decena de años : Su padre decedido cuando el no tenía más que veinte meses, en realidad estaría aún en vida. Apoyandonos sobre los elementos de la vida del autor, y particularmente sobre la relación intima a la fé cristiana ; proponemos la hipótesis que la pubertad ha sido para el jóven muchacho, el momento de una importante efracción psíquica suceptible de provocar movimientos regresivos sin establecer una estructura psicótica. Este periodo casi patológico vendría a ser como una tentativa de mitigar la carencia del padre a travéz de una creación alucinatoria.
Es conveniente de precisar en que la guerra modifica la vida psíquica de los jóvenes sujetos y la mayoría de ellos adolescentes. Enseguida hay que insistir sobre las dificultades de reinserción que ellos encuentran a causa de la reputación de brujos que ellos adquieren. Examinaremos como esta última categorización se cristaliza en los dos Congos así como también los efectos que ocurren a causa de las « rupturas » de esos sujetos con las lógicas habituales de alianza y de filiación.
Adolescence, 2009, T. 27, n°2, pp. 329-348.
Revue semestrielle de psychanalyse, psychopathologie et sciences humaines, indexée AERES au listing PsycINFO publiée avec le concours du Centre National du Livre et de l’Université de Paris Diderot Paris 7