El seÒor V., fue hospitalizado en los servicios de psiquiatrÌa, y nosotros lo hemos encontrado en el marco de una consultaciÛn abierta en el servicio para recibir las quejas corporales de los pacientes sin tener en cuenta su diagnÛstico. El evento que ha turbado la vida del seÒor V., cuyo nombre en frances significa la vida se deduce de la desvitalizaciÛn de sus dientes sanos operados por un dentista. Luego de este evento conmovedor, el mismo aÒo que coencide con el acceso a la paternidad de un hijo ; el seÒor V. har· un encuentro fatal con un hombre. Sus palabras nos conducir·n sobre la pista de lo que ha podido provocar el conflicto psÌquico y ocasionar el fracaso de la represiÛn de una homosexualidad irrepresentable, inaceptable e imposible de ser asumida por el sujeto. Su pasiÛn homosexual, desconocida y reprimida lo ha llevado a una degradaciÛn fÌsica y psÌquica, y a quejas llenas de pesimismo, constituyendo asÌ un callejÛn sin salida en su vida sin problemas hasta ese momento. En la escenificaciÛn de su palabra, los hechos que nos relata adquieren un tal sentido que vienen de un modo u otro a darle novedades en lo que se refiere a la homosexualidad evocada por las palabras paternales y el fracaso de su represiÛn.
Archives de catégorie : ESP – Homosexualité 2 – 2001 T.19 n°1
ANDRE BROUSSELLE : MOVIMIENTOS PASIONALES Y PSICOSIS PASIONALES DE TRANFERENCIA
Tomando como marco de referencia el tema de la psicosis pasional de transferencia ; el estudio de un caso de M. C. Aubray nos ha permitido mostrar la negaciÛn de la heterosexualidad a travÈs de la focalizaciÛn incandescente del afecto, aquella parte monstruosa del cuerpo que es la superposiciÛn entre el edipo y lo arc·ico. La interrogaciÛn acerca del an·lisis como proceso que despierta o apaga las pasiones es retomada por el adolescente.
MARIE-CHRISTINE AUBRAY : SABINE
Los movimientos pasionales de la transferencia, son ilustrados por medio de la presentaciÛn de la cura de una adolescente enferma de espina-bÌfida.
El odio hacia su cuerpo transformado y vuelto p™ber, el miedo de no sentirse amada, y las identificaciones segundarias vienen a fundirse en una transferencia pasional, a la im·gen de una feminidad aspirada.
JEAN-BERNARD CHAPELIER : HOMOSEXUALIDAD, HOMOFILIA, Y FANTASMA DE AUTOPROCREACION
El fantasma de autoprocreaciÛn (el cual d· un sentido a la apariciÛn de la sexualidad genital madura) ayuda a abandonar la carga libidinal (sexualizada) familiar de tipo edÌpica (transgeneracional) en beneficio de una carga sexual de tipo homogeneracional. Este proceso de pasaje de la familia al grupo social (de parejas) es sumamente complejo y evoca una diversidad de fantasÌas que toman la forma de escenarios (pubertario, pedofÌlico, sadomasoquista…) que se refieren a los grupos internos. La fantasÌa de autoprocreaciÛn niega al mismo tiempo la castraciÛn, la escena primitiva, la diferencia de sexos ; pero desarrolla de manera transitoria aquello que nosotros llamamos la homofilia. En ese contexto, la homosexualidad podrÌa pensarse como una vicisitud de dicha homofilia mal sobrellevada. Para defender esta posiciÛn se hace referencia tanto a la clÌnica (individual o grupal) como a las pr·cticas de iniciaciÛn.
CHRISTIAN SEULIN :Ý REORGANIZACION DEL SIMBOLO FALICO DURANTE LA ADOLESCENCIA
A la adolescencia, el sujeto se ve confrontado a la integraciÛn de su identidad sexual genital y a la vida de adulto en medio de otros adultos, esos cambios conducen a la reorganizaciÛn de la simbÛlica f·lica, signo de plenitud narcÌsica cuyos soportes corporales se refieren al cuerpo total y al penis.
Al mismo tiempo que la evoluciÛn del sÌmbolo f·lico, se opera una revisiÛn de los ideales que le son asociados. Las dificultades encontradas, se acompaÒan de movimientos defensivos, y en particular de movimientos homoerÛticos suceptibles de fijarse. Los modelos de identificaciÛn propuestos al jÛven por los adultos influencian de una manera significativa su devenir.
CLAUDE SAVINAUD : TENER UN PADRE
Uno de los aspectos de la homosexualidad se apoya sobre el eje de la relaciÛn al padre grandioso. Esta representaciÛn alienante deja al sujeto en una especie de sumiciÛn masoquista que conduce a un autoerotismo infantil. La novedad del acceso a la pubertad est· en que Èsta se halla privada de sus elementos edÌpicos : evitamiento de la castraciÛn, la figura simbÛlica del padre se encuentra escondida, o confundida en los juegos de seducciÛn f·lica del edipo negativo. Nosotros haremos la hipÛtesis de una carga pulsional psÌquica sobre el padre maternal, quiÈn se vale de la seducciÛn para consolar el desamparo del adolescente abandonado por su madre.
DANIEL MARCELLI : NARCISISMO PRIMARIO Y HOMOSEXUALIDAD A LA ADOLESCENCIA
A menudo, el adolescente se halla entre la necesidad de identificarse y la necesidad de diferenciarse : de ese hecho, la homofilia se inscribe en el centro del proceso de la adolescencia. Entre la homofilia y la cuestiÛn de la sexualidad la frontera es en general estrecha. A menudo, el consultor se halla confrontado en la relaciÛn con su paciente a las diversas declinaciones posibles de una homosexualidad, ya sea neurÛtica, perversa, abandonica, etc. Este artÌculo se centra particularmente sobre la parte narcÌsica de la homosexualidad a travÈs de la relaciÛn precoz existente entre la madre y el niÒo y trata de establecer una diferencia entre la homosexualidad del niÒo y de la niÒa. Diversos casos clinicos sirven de ilustraciÛn.
SERGE LESOURD : EMERGENCIA DE LA HOMOSEXUALIDAD EN LA ADOLESCENCIA O ´ LES GENS DE LA MERE ª
Basandose en un caso clÌnico, el autor trata de mostrarnos como la homosexualidad adolescente, particularmente la femenina, (que ha interrogado la corriente psicoanalÌtica) puede ser considerada como una via normal de descubrimiento de los placeres corporales durante el acto sexual llevado a cabo en el periodo de la pubertad. Ello conduce al autor, a interrogarse sobre las consecuencias de los discursos sociales en boga a propÛsito del pasaje de vida que constituye la adolescencia ; y por consecuencia sobre el lugar acordado en la modernidad y postmodernidad a la homosexualidad experimentada y no ´ sublimada ª ; asÌ, S. Freud lo planteaba como una de las formas posibles de vÌnculo social.
COLETTE CHILAND : TRANSEXUALISMO Y HOMOSEXUALIDAD EN LA PUBERTAD
El autor trata acerca de las relaciones existentes entre la homosexualidad y los trastornos de la identidad sexualizada en el perÌodo de transformaciones que son propias a la pubertad.
En la mayor parte de casos, la homosexualidad no implica necesariamente el rechazo del sexo asignado. Generalmente el rechazo del sexo asignado, generalmente se acompaÒa de una atracciÛn por las personas del mismo sexo biolÛgico, quienes no son consideradas por el sujeto como homosexuales : esta atracciÛn es la consecuencia de la oposiciÛn entre su ´ verdadero sexo ª y su sexo biolÛgico. Las pr·cticas sexuales de los transexuales femeninos con los masculinos es diferente de los homosexuales. AsÌ mismo, las pr·cticas de los transexuales masculinos con los femeninos es diferente a las de los homosexuales pasivos.
Es durante la pubertad que el rechazo del sexo asignado es revelado o tiende a crecer; es tambiÈn durante este perÌodo que la homosexualidad aparece o va a tomar una forma m·s concreta ; sin embargo, se sabe que en ambos casos existen ´ vocaciones tardÌas ª.
La etiologia del transexualismo y de la homosexualidad es incierta. No es necesario precipitarse para etiquetar de homosexual un adolescente que viveÝ experiencias homosexuales e intervenir cuando un adolescente exprime el deseo.
JEAN BERGERET : ´ HOMOSEXUALIDAD ª OU ´ HOMOEROTISMO ª EN LA ADOLESCENCIA
Desde la Època de Ferenczi, la nociÛn de aotuerotismo corresponde al pasaje por una etapa intermediaria a™n narcisista que pretende alcanzar un objeto representado idealmente de manera especular y atractiva. Esta etapa asegura tanto la integraciÛn de las satisfacciones libidinosas autoerÛticas de un pasado muy remoto asÌ como la integraciÛn del conjunto de fijaciones narcisicas m·s tardÌas (segunda infancia y perÌodo de latencia) en el seno de la energÌa de la libido que es verdaderamente sexual y objetal en este perÌodo, y que adem·s ser· quien organizar· de manera idealmente completa y definitiva el primado organizacional de la personalidad adulta.
Se puede entonces considerar que el estatus de verdaderos ´ homosexuales ª, solo puede ser acordado a los sujetos que hayan beneficiado (a un momento avanzado de su desarrollo afectivo, es decir despuÈs de la adolescencia) de la posibilidad de alcanzar un nivel de elaboraciÛn y de organizaciÛn global de su personalidad bajo el primado de la genitalidad quienes a causa de crisis afectivas ulteriores han sufrido serias regresiones funcionales conduciendolos a un modo de relaciÛn narcisica ya sobrepasada la cual buscaba las respresentaciones de idÈnticos en el espejo.
Enseguida, el autor trata acerca de tres variedades distintas de homoerotismo : una de naturaleza funcional y transitoria, una otra instaurada en la patologÌa narcÌsica y finalmente aquella que se afirma sobre la vertiente psicotica.