El encuentro con François – elegante joven de 35 años que acudió a solicitarme un análisis tras enterarse de que era autora de un libro sobre la pedofilia (Entre père et fils. La prostitution homosexuelle des garçons, Paris : PUF, 1988 ; en colaboración con Roger Teboul) – me condujo a un nuevo enfoque sobre las prácticas pedofílicas.
En efecto, si bien resulta evidente que numerosos casos de pedofilia se caracterizan por situaciones de carencia y maltrato para ambas partes (adulto y niño), me parece que un rasgo adicional une a los pedófilos y a sus víctimas : no sólo la existencia sino también la transmisión transgeneracional de una o varias formas de maltrato, tanto físicas como psíquicas, aún más perniciosas.
En un primer momento, abordaré la cuestión a partir del caso de François, comparado a historias clínicas anteriores ; posteriormente, indagaré el impacto del maltrato en la constitución psíquica, así como sus diversos aspectos psicopatológicos.El maltrato conduce ineludiblemente a la problemática del incesto, con la subsecuente transmisión transgeneracional, en ausencia de intervención terapéutica, abriendo así un nuevo ámbito de investigación
Finalmente, el poner en perspectiva una » opción » pedofílica aunada a una historia salpicada de maltratos, a menudo no asumidos como tales, nos proporcionará un argumento más para refutar la naturaleza incurable de los sujetos responsables de pedofilia y la inevitable reproducción de esa práctica por los niños víctimas.