A partir de un trabajo efectuado con un un adolescente sumergido en la violencia de luchas inter-étnicas, quién se volvió guerrero a la edad de diez años, inmediatamente después del asesinato de su familia por parte del clan adverso ; los autores analizan la realización de este acto en la realidad de la muerte del padre y sus efectos sobre el sujeto en el vínculo social. Suscitando así la reflexión sobre las interrogantes que suscita la violencia de los jóvenes de nuestra modernidad como “ réelisation ” (materialización) de la muerte del padre.