El registro del momento nos pone directamente la interrogación del deseo y de su influencia en el proceso de subjetivación. A partir de la problemática del encuentro en el caso del libertino, el autor nos propone una exposición de lo que está en juego en la relación y ello durante los inicios de la genitalidad.
El registro de la pérdida consentida instituiría la creación de un yo enamorado y masoquista sobre el cual se apoyaria en parte la evolución subjetal. El momento – por el efecto de desinterés que el introduce en el momento del encuentro, pero al mismo tiempo por este efecto de perspectiva que el suscita – potencializaría esta operación determinante para el sujeto genital.