El autor insiste sobre cuatro puntos evocados por J. Dayan, B. Guillery-Girard. El primero trata de los cambios en las concepciones de la adolescencia hacia un modelo teleológico. El segundo propone una nueva lectura de los símbolos clínicos : una proposición del acto no como un síntoma si no como un proceso de estructuración. El tercero trata de la manera en que se puede pensar la articulación entre neurociencias y psicoanálisis. El último aborda la edificación de un nuevo marco teórico para la psicopatología. Desde un punto de vista completamente neuro científico en la psicología del sentido común hacia una creación teórica fecunda, esas interacciones no dejan de interrogarnos.
Adolescence, 2011, T. 29 n°34, pp. 517-526.