Un fenómeno cultural que se halla en el cruce de las interrogaciones sobre lo virtual y la adolescencia, podría constituir el entusismo de estos últimos por las marcas.
Como la imágen, la marca (equivalente contemporaneo de la mitología) constituiría a la vez, un objeto y una relación. Ello modificaría la perspectiva de su estudio y particularmente en aquello que concierne los vínculos que los adolescentes entretienen con ella.