La fiesta condensa dos aspectos contradictorios, uno de ellos individual a saber : encontrar la pareja de amor y/o sexual ideal y la otra de encontrar la seguridad narcísica en el seno de un grupo que promete los placeres sin comparación. La elección es aún mas dificil puesto que las dos soluciones tienen fantasmáticamente la misma consecuencia : la felicidad del « sentimiento oceanico » y el hecho de hallarse entre la fidelidad al grupo y la esperanza de un encuentro amoroso. El adolescente opta a menudo por una tercera vía, el de la búsqueda rápida de un segundo estado a través de la consumación de alcohool o de estupefacientes.