La clínica de adolescentes presentando graves deficiencias intelectuales suscita numerosas interrogantes sobre las posibilidades de trabajo de la adolescencia en su doble trayectoria de acceso a la sexualidad genital y de una nueva base temporal. El acceso a la simbolización parece truncado por las insuficiencias instrumentales instaladas de largo tiempo poniendo trabas al proceso de desarrollo. Generalmente reducido al espacio del mas pequeño, el espacio del jóven deficiente, queda efectivamente marcado por las modalidades muy arcaicas de funcionamiento psíquico ; las cuales, tienden a inmobilizar toda trayectoria temporal y toda alteridad. Sin embargo, la sexualidad pubertaria no esta ausente pero su elaboración va a tomar caminos descentrados en relación al paradigma habitual del teatro nevrótico. El aporte de teorizaciones emanando del autismo infantil y de los trabajos contemporaneos de la psicosomática ; propone un campo de investigación sobre la heterogeneidad de modos de simbolización que encontramos en ciertas formas de patología deficitaria, y abre el impase de una vision, centrada unicamente sobre el aspecto deficiente sobre la complejidad de esos modos de organización, y de manera singular al momento de la adolescencia , momento, donde el interés por el cuerpo en su dimension pulsional y sensorial está en primer plan en el camino del tiempo y del otro.