Archives par mot-clé : Yo

Anne Tassel : ¿ responsabilidad sin culpabilidad ?

Que las coordenadas sociológicas de un cierto estado de incertidumbre nos obligan a un esfuerzo de hermenéutica que repercutirá sobre una subjetividad destinada a volverse pública y que cediendo a un movimiento de interiorización de la responsabilidad ; nosotros seamos liberados de la culpabilidad que entravan tantos nuestros actos como nuestras acciones. El constato que hace A. Ehrenberg sobre el trabajo contemporáneo de la adolescencia, si bien es prometedor también parece dejar en la sombra los aspectos mas dolorosos de la angustia y la culpabilidad cuyo equilibrio constituye el trabajo de la fantasia.

Adolescence, 2011, T. 29 n°34, pp. 595-601.

philippe gutton, marie-christine aubray : entre nosotros

El concepto de vínculo se define a través de los procesos terciarios tratados por Green. el « nosotros », manera intersubjetiva agranda esta definición. El uso de términos psicopatológicos y psicoterapéuticos del vínculo es más claro. Enseguida Marie-christine Aubray propone un razonamiento clínico.

viviane dubol : la prostitución ; entre los orificios del cuerpo y de las palabras. ¿ Una experiencia de subjetivación ?

Este artículo pretende constituirse en una reflexión clínica sobre el acto de la prostitución y los procesos psíquicos que dicho acto engendra. Un horizonte sobre la historia de las hipótesis de la investigación y sus momentos fuertes, nos permite de señalar hasta que punto, el conocimiento de la amnanesis y del traumatismo es insuficiente para comprender el destino prostitucional. La escucha de la clínica me ha llevado a tomar en cuenta la fuerza de las palabras que tienen valor de ordenes como « no eres más que una prostituta » o « yo soy una prostituta » fabricado por el sujeto mismo. En ese contexto de sensibilidad a las palabras es que se dió a conocer la función del « cuarto pesonaje » ; como la figura de un Otro social femenino, a quién se dirigia el acto de prostitución y de lo que se juega para el sujeto. En efecto, y tal es nuestra hipótesis de investigación : La erotología de ciertos actos de prostitución participaría a una construcción de soi através de experiencias autoeróticas alrrededor de los orificios del cuerpo, y de aquello que la psicoanalisis llama el objeto a minuscula. Como lo indica aquello que nosotros hemos descrito de « el acto de prostitución symbolico », el amor no está ausente de un tal proceso de subjetivación.

raymond cahn : subjetalidad y subjetivación

A partir de la distinción freudiana originaria entre sujeto del yo y objeto del yo ; es decir entre polo subjetal y polo objectal. La subjetalidad es concebida como un proceso que permite la emergencia de un yo creativo y autónomo que nos aclara por medio de ciertas perturbaciones ciertos aspectos esenciales del marco de referencia y de la contra-transferencia condicionando así, la posibilidad de un verdadero trabajo psicoanalítico.

gérard bonnet : la entrada del sujeto adolescente en política, el rol crucial de sus ideales

¿Como un adolescente puede entrar en política en el sentido propio del término ? El amor de los ideales el cual se manifiesta brutalmente en este periodo de la existencia, es probablemente la causa más determinante. Todavía falta precisar los componentes de este amor y las diferentes categorías de los ideales concernidos. Lo que Freud no ha hecho más que esquizar en la segunda parte de su obra. Entonces, nos apercibimos que el acceso a la política supone a la vez la adhesión a los ideales los más universales y el respeto de los ideales narcísicos parciales o sociales que impone la existencia. Es entonces una fuente de conflictos permanentes y el adolescente no puede ocuparse de ellos a nivel colectivo de otra manera que entrando en el discurso político en el sentido mas largo. Considerando los ideales y llamándolos por su propio nombre sin ocultarse sus propios limites. Es por este camino que el lo retoma por su cuenta y se comporta en sujeto un sujeto necesariamente dividido entre sus imperativos contradictorios pero que toma el riesgo de proponerse a partir de sus propias convicciones.

Adolescence, 2010, T. 28, n°1, pp. 27-50.