JEAN-MARC TALPIN : NARCISO Y PIGMALIÓN O EL DESPRENDIMIENTO ESTÉTICO

Mientras Narciso muere contemplando su propia imagen ignorada como tal, Pigmalión crea una estatua para evitar el encuentro adolescente con su propio sexo y con el sexo del otro, pero termina enamorándose de su obra y logra transformarla en mujer. La distancia que separa a ambos personajes pone en juego el desprendimiento narcisista, las capacidades de simbolización durante la adolescencia en el registro de las obras de cultura y de arte. Por su materialidad y por su estructura propia, las obras creadas por él mismo o por otro, brindan al adolescente un marco para poner a la obra sus procesos psíquicos. Esta distancia nos lleva también a interrogarnos en torno al sitio de las pulsiones parciales durante la adolescencia, en referencia a la sublimación y a la genitalidad, así como a la bisexualidad psíquica.